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miércoles, 2 de febrero de 2011

El Eterno Dilema de los Equipos

Desde hace casi dos años he estado implementando el uso de la informática en mi equipo, concretamente el empleo de programas de simulación de efectos y amplificadores. En los últimos meses he estado usando esta configuración exclusivamente con muy buenos resultados, echando un poco por tierra las opiniones de muchos guitarristas que dicen que esta tecnología no es comparable con "THE REAL THING" como lo llaman muchos foreros especializados en páginas de discusión sobre esta materia y que se traduciría más o menos como EQUIPO REAL.

Trabajar con estos softwares no es facil y tampoco es igual su comportamiento con respecto a los EQUIPOS REALES, si bien es cierto que emulan estos equipos la reacción de estos programas hacia la configuración de los componentes en la cadena de sonido y ante la señal misma puede sorprendernos y obtener resultados no esperados, así que es menester conocerlos y acostumbrase a ellos, como dice mi madre "para todo hay que aprender, hasta para barrer las calles".

Lo cierto es que después de estudiar a fondo esta tecnología, probar diferentes programas y meterles literalmente mano he llegado, como he dicho antes a muy buenos resultados, siempre mejorables, eso si, pero siento haber llegado a un nivel de conformidad ante este recurso por demás versátil. En tal sentido había estado planeando en invertir en un nuevo hardware con más potencia y que manejara con más "alivio" el severo consumo de CPU que estos programas exigen y sacar provecho al "oversampling" que de momento mi ACER Aspire One no puede manejar, demasiado ha hecho el pobre ya.

El DILEMA es que recientemente, navegando por internet, en busca de información sobre aspectos técnicos, me topé por accidente con lo nuevo de ROLAND, el GR-55 Guitar Synthetiser, que ademas es simulador de efectos y amplificación, así como emulador de guitarras y otros equipos con tecnología COSM. Son tres aparatos en uno, el sintetizador de guitarra de última generación actualizaría a mi viejo GR-1 de principios de los '90 y que tantas satisfacciones me ha dado, el simulador de efectos y el emulador COSM sustituiría a el uso de softwares de simulación con la ventaja añadida de tratarse de EQUIPO FÍSICO y no LÓGICO informático siempre susceptible de fallo (sobre todo en Windows) aunque tengo que reconocer que nunca lo ha hecho y que con un punto a su favor tiene la versatilidad de infinitas posibilidades de configuración.

En fin, para no extenderme más, de nuevo al dilema y es que dicho aparato cuesta aproximadamente lo mismo que el nuevo equipo informático que tenía pensado. El nuevo Roland GR-55 me tiene loco pero la tecnología de softwares de simulación también con programas como VANDAL AMPS, AMPLITUBE 3 y GUITAR RIG 4, sobre todo con los resultados ya obtenidos. He de pensar bien la elección... o tal vez, quizás, reunir un poco más de dinero y adquirir los dos equipos y así tener lo mejor de ambos mundos, es cosa de presupuesto... como dice la canción... si yo fuera rico...